En “L’Entracte de L’Apothéose” se autorretrata en un ser delicadamente andrógino, cuya feminidad atrapa al espectador en un voyeurismo tenso. La heroína se desprende de sus medias mirando al espectador, mientras tres terribles damas la rodean por detrás desprendiéndose de sus atributos de mujer. Las tres Parcas, o Brujas, o Furias, abandonan los largos cabellos femeninos y se arrancan incluso los rostros como si se de una segunda piel se tratasen. Máscaras. La obra se convierte en un juego de apariencias donde la belleza se besa con el horror para hipnotizar al espectador en una danza macabra de la vida.
La Apoteosis, la plenitud, tiene que pasar forzosamente por esta escena nocturna, por este paisaje de revelación, integrando el cuadro en la tradición alquímica que describe la obtención de la condición divina a partir de una fase negra o de podredumbre. Los elementos paganos y la imaginería de la ascensión mariana se unen sin rubores en un ambiente de pesadilla, mientras, los que soñamos, no podemos dejar de mirar al ser esbelto que muestra sus misterios. Sus figuras tiene rasgos de bailarinas romanas. De alguos de los 29 personajes desconocidos de los frescos de la villa de los Misterios de Pompeya integrados en figuras enigmáticas, que parecen hacer alusión a los ritos de Dionisos, dios del vino y de la fieta. Están vestidas a la griega o a la romana. Bacantes danzando. Leonor Fini, Buenos Aires (Argentina) 1908.París, (Francia, 1996)
domingo, 19 de junio de 2011 ALEJANDRA EN EL PAIS DE LOS ESPEJOS ROTOS Alejandra en el país de los espejos rotos(La metáfora del espejo en la poética de Alejandra Pizarnik) Lorena A. Di Lecce En este blog.
Martha6 de abril de 2015, 11:23 Aparecen los conceptos freudianos-sin duda- vinculados al surrealismo, figuras oníricas, animales alados, hadas, sueños, fantasías, se convirtieron en aspectos básicos de la iconografía, Estas imágenes, surrealistas, que Fer describió lo femenino como metáfora de la diferencia fundamental. Pretendían crear dos géneros autónomos que correspondieran a dos sexos iguales. En relación a las vinculaciones del Surrealismo con el Psicoanálisis y la cuestión femenina Luce Irigaray señala tres objetivos en su obra; -revelar la ideología masculina que subyace tras el sistema del significado y, por lo tanto, del lenguaje; -crear un contrasistema femenino como identidad sexual positiva para las mujeres; -establecer una relación subjetiva de "ser dos" entre hombre y mujer. Actualmente lo verificamos en Cindy Sherman, por ejemplo- con sus investigaciones sobre prótesis y las partes del cuerpo como sintomáticas de una dimensión del deseo y de la subjetividad humana más amplias e inclusivas. Por estos días escuché-algo así-como que Freud ni Lacan, no se utilizan más, o están en desuso, algo así.. Si esto es así, perdón entonces; no se me ocurre vincular la temática de las imágenes de Carrington con el lóbulo frontal, ni con el hipocampo. La Neurociencia -me parece-no tendría nada o, muy poco para decir de estas cuestiones femeninas.Estuvo internada en una clínica psiquiátrica, quizá haya recibido algún diagnóstico psiquiátrico que no estoy capacitada para juzgar. Por consiguiente, la creación artística se convierte en una forma de desplazamiento simbólico a través del cual la artista muestra y recrea su propio mundo. Quizá su pintura la salvó; hay una expresión suya que dice algo así, como que esas imágenes son primero y por ahí se constituyó, ella como persona. Tenemos el caso de Yayoy Kusama
En “L’Entracte de L’Apothéose” se autorretrata en un ser delicadamente andrógino, cuya feminidad atrapa al espectador en un voyeurismo tenso. La heroína se desprende de sus medias mirando al espectador, mientras tres terribles damas la rodean por detrás desprendiéndose de sus atributos de mujer. Las tres Parcas, o Brujas, o Furias, abandonan los largos cabellos femeninos y se arrancan incluso los rostros como si se de una segunda piel se tratasen. Máscaras. La obra se convierte en un juego de apariencias donde la belleza se besa con el horror para hipnotizar al espectador en una danza macabra de la vida.
ResponderEliminarLa Apoteosis, la plenitud, tiene que pasar forzosamente por esta escena nocturna, por este paisaje de revelación, integrando el cuadro en la tradición alquímica que describe la obtención de la condición divina a partir de una fase negra o de podredumbre. Los elementos paganos y la imaginería de la ascensión mariana se unen sin rubores en un ambiente de pesadilla, mientras, los que soñamos, no podemos dejar de mirar al ser esbelto que muestra sus misterios.
Sus figuras tiene rasgos de bailarinas romanas. De alguos de los 29 personajes desconocidos de los frescos de la villa de los Misterios de Pompeya integrados en figuras enigmáticas, que parecen hacer alusión a los ritos de Dionisos, dios del vino y de la fieta. Están vestidas a la griega o a la romana. Bacantes danzando.
Leonor Fini, Buenos Aires (Argentina) 1908.París, (Francia, 1996)
domingo, 19 de junio de 2011
ResponderEliminarALEJANDRA EN EL PAIS DE LOS ESPEJOS ROTOS
Alejandra en el país de los espejos rotos(La metáfora del espejo en la poética de Alejandra Pizarnik)
Lorena A. Di Lecce En este blog.
sábado, 11 de noviembre de 2017
ResponderEliminarRemedios Varo: la pintura (Mujeres para un siglo, 2004)
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Martha6 de abril de 2015, 11:23
ResponderEliminarAparecen los conceptos freudianos-sin duda- vinculados al surrealismo, figuras oníricas, animales alados, hadas, sueños, fantasías, se convirtieron en aspectos básicos de la iconografía, Estas imágenes, surrealistas, que Fer describió lo femenino como metáfora de la diferencia fundamental. Pretendían crear dos géneros autónomos que correspondieran a dos sexos iguales.
En relación a las vinculaciones del Surrealismo con el Psicoanálisis y la cuestión femenina Luce Irigaray señala tres objetivos en su obra;
-revelar la ideología masculina que subyace tras el sistema del significado y, por lo tanto, del lenguaje;
-crear un contrasistema femenino como identidad sexual positiva para las mujeres;
-establecer una relación subjetiva de "ser dos" entre hombre y mujer.
Actualmente lo verificamos en Cindy Sherman, por ejemplo- con sus investigaciones sobre prótesis y las partes del cuerpo como sintomáticas de una dimensión del deseo y de la subjetividad humana más amplias e inclusivas.
Por estos días escuché-algo así-como que Freud ni Lacan, no se utilizan más, o están en desuso, algo así.. Si esto es así, perdón entonces; no se me ocurre vincular la temática de las imágenes de Carrington con el lóbulo frontal, ni con el hipocampo. La Neurociencia -me parece-no tendría nada o, muy poco para decir de estas cuestiones femeninas.Estuvo internada en una clínica psiquiátrica, quizá haya recibido algún diagnóstico psiquiátrico que no estoy capacitada para juzgar.
Por consiguiente, la creación artística se convierte en una forma de desplazamiento simbólico a través del cual la artista muestra y recrea su propio mundo. Quizá su pintura la salvó; hay una expresión suya que dice algo así, como que esas imágenes son primero y por ahí se constituyó, ella como persona. Tenemos el caso de Yayoy Kusama