domingo, 7 de septiembre de 2014

31a BIENAL DE SAN PABLO- CÓMO HABLAR DEL ARTE CUANDO SE ENFOCA LA REALIDAD

31ª BIENAL DE SAN PABLO – COMO HABLAR DEL ARTE CUANDO SE ENFOCA EN LA REALIDAD

CHARLES ESCHE, CURADOR DE LA 31ª BIENAL DE SAN PABLO, BRASIL.
CHARLES ESCHE, CURADOR DE LA 31ª BIENAL DE SAN PABLO, BRASIL.
“COMO HABLAR DE COSAS QUE NO EXISTEN” (COMO FALAR DE COISAS QUE NAO EXISTEM). TEMA CONVOCANTE DE LA 31ª BIENAL DE SAN PABLO, COMO PUEDE EL ARTE ENFOCARSE, REFLEXIONAR Y OPERAR SOBRE LA REALIDAD.
MAS DE LA MITAD DE LOS ARTISTAS PARTICIPANTES PIDIERON A LOS ORGANIZADORES QUE NO ACEPTEN FONDOS DE ISRAEL PORQUE CREEN QUE ESA FINANCIACIÓN BUSCA LEGITIMAR VIOLACIONES AL DERECHO INTERNACIONAL Y A LOS DERECHOS HUMANOS.
LA BIENAL DE SAN PABLO LOGRO ESTE AÑO UN FUERTE RESPALDO ECONÓMICO A TRAVÉS DE LA ASOCIACIÓN CON ITAU COMERCIAL (BANCO ITAU).
La 31ª Bienal de San Pablo comenzó hoy en Brasil precedida por la expectativa habitual, pero también con aires de discordia. La negativa del reconocido artista brasileño Tunga a participar este año en el encuentro, después de haber comprometido su presencia, así como la carta enviada por 55 de los 100 artistas que intervienen en la exposición solicitando que se retire el patrocinio de Israel, aportaron una cuota de conflicto y redoblaron las exigencias organizativas, en especial, del equipo curatorial que encabeza el británico Charles Esche.
Mientras Tunga anunciaba que no sería parte de la muestra “por falta de tiempo y del espacio necesario para desarrollar y presentar su proyecto”, aparecía en “Hyperallergic” una nota firmada por más de la mitad de los artistas participantes, quienes sostenían que la financiación aportada por Israel dañaba las obras que ellos expondrían en la bienal ya que, “implícitamente, serían utilizadas para legitimar la agresión y la violación del derecho internacional y los derechos humanos que comete” el gobierno de Tel Aviv.
“Rechazamos el intento de Israel de normalizarse en el marco de un gran encuentro cultural internacional en Brasil. Con esta declaración, hacemos un llamamiento a la Fundación Bienal para que rechace estos fondos y tome medidas sobre este asunto antes de la inauguración de la exposición”, concluían los artistas.05_AereaPavilhao
Si bien las autoridades de la fundación comprometieron una respuesta, Esche y su equipo lo hicieron de inmediato y respaldaron la acción de los artistas que habían firmado la carta. Según  “Hyperallergic”, la nota remitida por el equipo encabezado por Esche indicaba: “los curadores de la 31ª Bienal de San Pablo, apoyamos a los artistas y entendemos su posición. Creemos que tanto su declaración como su demanda debe constituir también un disparador para pensar acerca de las fuentes de financiación de los grandes encuentros culturales”.
Además, los curadores destacaron que en esta bienal “gran parte del trabajo consiste en demostrar que la lucha por la justicia en Brasil, en el resto de América Latina y en otras partes del mundo están relacionadas”, por lo que instaban a los organizadores a rever sus políticas de patrocinio.
El equipo curatorial que lidera Esche está integrado, además, por los españoles Nuria Enguita Mayo y Pablo Lafuente, los israelíes Galit Eilat y Oren Sagiv y los curadores asociados Benjamín Seroussi y Luiz Proença. Fueron ellos los que eligieron como tema de la 31ª Bienal “Como hablar de cosas que no existen” (“Como falar de coisas que não existem”).
Los curadores seleccionaron 81 proyectos, tanto individuales como colectivos, realizados por 100 artistas de más de 30 países, lo que se traduce en alrededor de 250 obras, la mitad de las cuales se han elaborado especialmente para la bienal y en relación con su tema convocante, que invita a reflexionar sobre el arte y su capacidad de pensar y operar sobre la vida, el poder y las creencias.
Dentro de esta concepción, la bienal será un ámbito para analizar el contexto actual y las formas en que el arte puede implicarse y reflejar los hechos y los protagonistas de la actualidad, algo que responde a una tendencia mundial, ya que las bienales se muestran cada vez más comprometidas con las sociedades y las problemáticas del momento.
Entre los artistas que participan se cuentan los brasileños Clara Ianni (São Paulo, 1987), Thiago Martins de Melo (São Luiz do Maranhão, 1981), Arthur Scovino (São Gonçalo, Río de Janeiro, 1980),  Yuri Firmeza (São Paulo, 1982), Gabriel Mascaro (Recife, 1981) y Romy Pocztaruk (Porto Alegre, 1983), los españoles Teresa Lanceta (Barcelona, 1951), Pedro G. Romero (Aracena, Huelva, 1964), Juan Pérez Agirregoikoa (San Sebastián, 1963), Asier Mendizabal (Ordizia, Guipúzcoa, 1973) y el desaparecido José Val del Omar (Granada, 1904 – Madrid, 1982) y los argentinos Grupo Etcétera (colectivo) junto con el fallecido León Ferrari (Buenos Aires, 1920 – 2013),  Alejandra Riera (Buenos Aires, 1965), Juan Carlos Romero (Avellaneda, Buenos Aires, 1931) y Vivian Suter (Buenos Aires, 1949).
También estarán  los chilenos Voluspa Jarpa y Juan Downey (fallecido), los colombianos Johanna Calle y MAPA Teatro – Laboratorio de artistas, Bruno Pacheco (Portugal), Erick Beltrán (México), el colectivo Mujeres Creando (Bolivia), Lázaro Saavedra (Cuba), Giuseppe Campuzano (Perú), Nilbar Güres y Halil Altindere (Turquía), Tiago Borges y Yonamine (Angola), Mark Lewis (Canadá), Dan Perjovschi (Rumania), Imogen Stidworthy (Reino Unido), Walid Raad (Líbano), Yael Bartana (Israel) y Joe Baer (Estados Unidos).
Por otra parte, la bienal, la segunda en importancia después de la de Venecia, consiguió para esta edición un fuerte respaldo financiero, en particular de Itaú Cultural (del Banco Itaú) que se asoció este año con la Fundación Bienal de San Pablo como coproductora de la muestra que, en 2014, demandó un presupuesto de 7,7 millones de euros.
 www.artezineblog.wordpress.com.ar

2 comentarios:

  1. ABEL H. POZUELO | 09/11/2012 | Edición impresa

    Vista de la exposición

    Las estrategias de demolición del discurso cultural principal y del sistema socioeconómico y político son algo todavía muy habitual como propósito y plan de los artistas. Acaso cada vez más, por lo que quizá deducimos que aún resultan necesarias. Con el candor disipado hace décadas, se da por descontado que cualquiera de ellas acabará siendo absorbida por esa inercia propia del ciclo cultural y discursivo coetáneo, que tenderá a atraer hasta su núcleo a cualquier partícula disidente, integrándola o, llegado el caso, desintegrándola. El establishment, una gran bola de plastilina de color indefinido que va adhiriendo en su rodar todas las demás pequeñas formas de colores. Hay quien piensa que algo queda, como un ruido parásito que destiñe levemente la voz del líder en televisión. Como la carcajada de un chiquilloen un acto oficial. Una impresión de titubeo.

    Juan Pérez Agirregoikoa (1963) se planta en este Museo Nacional gracias a Fisuras, programa que busca propiciar reflexiones alternativas sobre el museo y su función mediante proyectos creados específicamente.

    Al entrar en el Espacio Uno, nos da la bienvenida un gran dibujo en grises de carboncillo donde aparece una sala de estar cualquiera donde dos perros miran hacia nosotros mientras parecen aparearse a espaldas de un sillón desde el que alguien está mirando la comparecencia del actual presidente del gobierno en el televisor. Una frase en inglés reza: "usted está entrando en un mundo de dolor". Sobre las cuatro paredesde la sala contigua dos series incómodamente situadas sobre y bajo el ángulo normal de la mirada. La superior da título a toda la muestra: ¿Queréis un amo? ¡Lo tendréis!, 38 carboncillos donde escenas del adiestramiento de un perro feroz se emplazan en paralelo al de seres humanos que acaban medio convertidos en perros. El amo de éstos no está claro pero por el tono parece fácil deducir que es el mismo sistema con que regimos nuestras cosas y nuestras vidas. La inferior se titula Mutar y consiste en varias grandes acuarelas donde se alternan variaciones de los mismos retratos de Fraga, la Duquesa de Alba y Liz Taylor, de cuerpo postrado en silla de ruedas y en su vejez. Funcionan como emblemas de tres formas de poder (político, socioeconómico y sexual) y su vanitas.
    el.cultural.es
    Se puede apreciar en este blog el 5 de noviembre de 2012, parte de la mencionada exposición, fundada en una expresión lacaniana: ¿Queréis un amo? Lo tendréis.
    Me pareció muy esclarecida la posición del artista en relación con el conflicto surgido en la Bienal de Brasil.

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  2. Te Culture Lovers, 2012

    En la Sala de Protocolo, dos cortos de animación modesta echan más leña al ardor del malestar. En The Culture Lovers el donostiarra desenmascara, desde la experiencia propia, la ilusión antisistema de subculturas juveniles supuestamente alternativas como la de los patinadores, en realidad plenamente integradas. Mientras, en Erased pone en relación de manera poco obvia (con alusión a sus frecuentadas artes marciales, incluida) el acto de destrucción cultural de los dos Budas gigantes de Bamiyan por parte de los talibanes con el gesto poético de Rauschenberg al borrar, en 1953, un dibujo de De Kooning para convertirlo en otra obra.

    Miradas al poder delegado, la caducidad de su vigencia y la función de la cultura y el espectáculo como pegamento social que nos adhiere, nos suma (nos vuelve sumisos) a ese mismo poder delegado. Por debajo, estas obras toquetean obscenamente una de las fibras sensibles para mucha gente de a pie con respecto al arte actual, uno de esos motivos que lo convierten en cuestionable: no tanto la creación de obras como éstas sino su ulterior exhibición en el museo público. ¿Cómo puede éste alojar lo que busca su destrucción? Dicen unos. ¿Cómo puede no desactivar su carga subversiva? Los otros.

    Una vez practicadas las correspondientes fisuras críticas, el artista sitúa sus hilillos de plastilina bajo la sombra de la inminentemente gigantesca bola rodante y pegajosa y se mofa de todos los gestos poéticos y de su representación en el edificio que les da cobijo a fin de comprobar cuánto puede su risa. Para Juan Pérez Agirregoikoa la obra, o sea la broma, se completa de esta manera. El haber conseguido llegar al Museo Reina Sofía no hace otra cosa que confirmar lo que su propia risa denuncia. Nosotros somos emperadores desnudos.el.cultural.es

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