lunes, 26 de noviembre de 2012

"LOS MUSEOS Y LA UNIVERSIDAD SON DOS MITADES DE UN MISMO MUNDO"


"Los museos y la universidad son dos mitades de un mismo mundo"

20.11.2012Carmen Gª Herrería. Siga al autor en0
Guillermo Solana es filósofo, crítico de Arte y profesor de Estética en la Universidad Autónoma de Madrid. Y, desde 2005, director artístico del Museo Thyssen- Bornemisza.
Guillermo Solana, director del Thyssen, en una de las salas de exposiciones. / Rafa Martín
Guillermo Solana, director del Thyssen, en una de las salas de exposiciones. / Rafa Martín
Guillermo Solana (Madrid, 1960) dejó hace 7 años las aulas para coger el timón del Museo Thyssen-Bornemisza, que en los últimos años no ha parado de batir su propio récord de visitantes.

¿Se parecen el oficio de profesor y el de director de un museo?
En cierto modo sí. La educación está muy en el centro de un museo, pero al mismo tiempo tiene la gran ventaja, con respecto a la Universidad, de que está mucho más en relación con la vida de la sociedad, vive más pegado a la actualidad; las cosas se renuevan, no cada 5 años, sino cada 3 meses.

Si entendemos los museos como un foco de cultura, a la Universidad le interesa ir de su mano, ¿no?
Sí, yo entiendo que los museos y la universidad son dos mitades de un mismo mundo, en el arte y en la cultura en general. Por eso nosotros cultivamos unas relaciones fluidas con ella. Por ejemplo, tenemos convenios con las universidades públicas de Madrid, traemos a sus alumnos a hacer prácticas aquí, todos nuestros ciclos de conferencias están reconocidos con créditos, etc.

¿Con qué compararía la dirección de una pinacoteca como esta?
Se parece un poco a un periódico. Los periodistas le explican al público la política, la economía, la ciencia… Son grandes divulgadores aunque no sean especialistas en todo. Los museos somos divulgadores del arte; a veces yo tengo que contar muchas exposiciones en las que no soy especialista, desde arte del Renacimiento hasta Cartier, desde Gauguin hasta Hopper.

¿Hay algún espacio o cuadro en el Thyssen que le descanse especialmente?
Sí, hay varios, pero digamos que la galería de la colección Carmen Thyssen. Se puede uno sentar allí y ver la historia del paisaje desde el S.XVII hasta el S.XIX.

Este museo aúna arte clásico y vanguardias históricas, ¿con qué se queda Guillermo Solana?
Depende de la temporada. Lo más divertido de los museos es que puedes cambiar y una semana ser clásico y otra semana ser muy moderno. A mí me gusta tanto el arte antiguo como el moderno.

¿Son mejores las exposiciones temporales que la colección permanente o piensa que a veces no valoramos tanto lo que tenemos como la novedad?
Así como los turistas vienen a ver lo permanente, los visitantes locales, que ya dan por conocida las cosas que están permanentemente, se interesan por las cosas temporales; porque tienen el atractivo de la novedad y de lo efímero. Como la gente sabe que se van a desmontar en dos meses, se apresuran a venir a verlas.

¿Cuáles son los retos del Thyssen para 2013?
Este año hemos tenido muy buenos resultados, mucho mejores de lo que preveíamos. ¿El año que viene? ¡Qué me quede como estoy! Si las cosas se quedarán así ya sería estupendo, porque con la que está cayendo, será una buena noticia.

Lea la entrevista completa en Orbyt.www.arteinformado.com

3 comentarios:

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  2. El Museo de Arte, lugar de reunión de artistas y de espectadores, es además un lugar de producción de saberes que desde las colecciones se transmiten al público.
    Constituye, además un laboratorio dónde se ha elaborado la forma moderna de exposición.
    El Centro Pompidou de París constituye, en mi opinión un modelo a seguir. Me atrevería a decir que la Universidad debería hacerlo en primer lugar. Como si el Amo fuera hacia el esclavo en demanda de un saber. Expresa Lacan: ¿"Qué señala a la filosofía en toda su evolución?- el robo, el rapto, la sustracción del saber a la esclavitud por la operación del Amo. "La función de la episteme, especificada como saber transmisible(diálogos de Platón) está siempre tomada por entero de las técnicas artesanales, es decir siervas. Se trata de extraer su esencia para que ese saber, se convierta en saber de Amo. Se trataría de histerizar al discurso artístico- museístico, hacerlo industrioso, para que en la transferencia de sus depósitos a la Universidad, este discurso universitario en el curso del desarrollo histórico devolviera en ese lugar, como tal vez esperábamos, lo que constituye la verdad.
    Sin embargo, el saber absoluto que enuncia Hegel, no le interesa al Amo. Lo que realmente le interesa, es que la cosa marche.
    Leíamos en este interesante reportaje el desfaje en los tiempos del Museo y en los de la Universidad. De tres meses, pasamos a cinco años.El crítico de arte Pierre Restany, afirma "Habrá que pasar a otro ritmo, replantear radicalmente el problema de otra manera, acceder directamente, a la noción de Museografía dinámica, hacer de la información y de la animación sobre el arte actual un servicio permanente".

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  3. La originalidad del Centro Pompidou consiste en reunir en un mismo lugar, el libro, las artes plásticas, la arquitectura, la música, el cine y la creación industrial y el Museo Virtual.
    Desacraliza el "Museo-Monumento".
    "La cultura es estática y sigue siendo el privilegio de la élite, analiza Renzo Piano( arquitecto que diseño el centro, Génova, 1937) nuestro problema es volverla viva, es necesario que pueda al mismo tiempo divertir e informar, no solamente a los turistas o a los especialistas, sino también a aquellos que habitan en los alrededores, un entorno en crisis."
    Los niños y los adolescentes de los 2 a los 12 años y otro grupo de 13 a 16 años, tienen allí un lugar donde, observar, experimentar, se familiarizan con el universo de los artistas.
    Su sola presencia en un lugar de cultura es un primer paso que podría llevarlo a un vídeo, a un taller, al dibujo, a la discusión de una obra, de una idea, acerca de un artista de su interés.
    Las colecciones siguen creciendo a un ritmo asombroso, según tres ejes definidos por Pontus Hultén a los cuales permanecerán fieles los sucesivos directores del Musée: completar el patrimonio histórico de la primera mitad del siglo XX, enriquecer la representación de las generaciones siguientes y seguir la actualidad contemporánea, internacional y francesa.
    Una parte del presupuesto estará siempre reservada para el dibujo, la fotografía y el arte del vídeo.

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